¡Baklava para todos!

Lo admito, mi película favorita de toda la historia del cine es... ¡Aladín! Como leéis, me gustan muchas películas pero la de Aladín es especial, la tengo clavadita en el corazón, y en su honor esta semana os presentamos una receta de un dulce árabe: el baklava

He visto esta película miles de veces y la canción de presentación del genio me parece la mejor de todas, pero siempre, me preguntaba que seria ese baklava que le ofrece a Aladín. Bueno pues unos cuantos años después no sólo se la solución sino que os traigo la receta de un dulce súper rico y muy, muy fácil de hacer.

Ingredientes
 Una cucharada de agua de azahar
150 gr de mantequilla sin sal (es lo que utilizamos para nuestro molde, puede que si usais un molde más grande o directamente la bandeja del horno necesitéis más cantidad)
200 gr de azúcar (o 250 si sois muy dulceros)
Un limón.
Un vaso de agua.
Frutos secos 400 gr (los frutos secos que más os gusten. Podéis hacer el baklava de un solo tipo de frutos secos o mezclar varios, en este caso mezclamos nueces y pistacho tostados SIN SAL)
Masa filo (nosotras lo compramos en Mercadona) empleamos dos paquetes (en cada paquete vienen entre 10 y 12 hojas)
Canela (es opcional)


Utensilios
Para esta receta vamos a necesitar una brocha de cocina o una lengua, unas tijeras, un cazo y un molde o la bandeja del horno.


Elaboración
Este dulce es muy fácil de hacer por lo que es ideal para que los peques de la casa (si tenéis) o ese amig@ que no sabe cocinar pero lo intenta sin descanso os ayude o incluso si sois vosotros los que no sabéis cocinar pero queréis dejar a todos alucinados con vuestro arte culinario. En esta ocasión tuvimos un colaborador muy especial, mi primo Vic al que mando un súper beso.

1º Picamos los frutos secos, nueces y pistachos en nuestro caso aunque también le podéis añadir almendras al natural. Picadlos intentando  que no quede todo pulverizado, dejad pequeños cachitos porque la  gracia del baklava está en que resulte un poco crujiente. Mezclamos todos los frutos secos y si nos gusta le añadimos una cucharada de canela, esto es totalmente opcional, el baklava esta igual de rico sin ella.

(reservar un poquito de los frutos secos para decorar)

2º Derretimos la mantequilla en el microhondas, y cortamos las hojas de masa filo a la medida de nuestro molde, los bordes que os sobran no los tiréis puesto que los podremos aprovechar más adelante, guardadlos en la bolsa de nuevo y a la nevera para que no se reseque la masa. Ponemos a precalentar el horno a 170 grados calor arriba y abajo.

3º Llega el momento del montaje. Para explicároslo fácilmente el baklava puede ser visto como una especie de lasaña, en el sentido de que está formado por capas. Empezamos untando el molde o la bandeja del horno con la mantequilla  usando la brocha de cocina como en la foto o la lengua (o cualquier otro utensilio que tengamos por casa y que nos sirva) y ponemos una hoja de masa filo, la untamos  otra vez con mantequilla y ponemos otra hoja de masa filo encima, y así vamos repitiendo hasta que tengamos 6 hojas de masa filo.
Cada vez que ponemos una hoja nueva apretamos un poco las capas anteriores antes de untar la mantequilla derretida de nuevo.

4º Una vez tengamos las primeras 6 capas de hojas vamos a añadir u tercio de la mezcla de frutos secos picados y cubrimos toda la superficie.

 5º La capa de frutos secos la cubrimos con una hoja de masa filo y untamos con mantequilla. Volvemos a hacer mantequilla- hoja-mantequilla-hoja... hasta tener 6 capas de hojas de masa filo.

6 º Repetimos el paso 4º y 5º
7º Una vez hayamos terminado  con la ultima capa de masa filo, hay que cortar el baklava antes de hornearlo, podemos cortarlo en triángulos, cuadrados o rombos, como más nos guste, pero intentando que sean del tamaño justo para que nos quepan en la boca. Al final tendremos algo como esto:

8º Metemos el baklava al horno durante 30 minutos o hasta que esté bien dorado.

 
9º  Mientras, ponemos en un cazo el agua, el azúcar, la corteza del limón, dos cucharadas de agua de azahar y dos cucharadas de zumo de limón para hacer un jarabe. Removemos bien para que se disuelva el azúcar y lo llevamos a ebullición. Una vez hierva lo dejamos al fuego entre 5 o 10 minutos, vigilando que no se empiece a tostar el azúcar. Pasado este tiempo apartamos del fuego y reservamos.

 10º  Nada más sacar el baklava del horno, espolvoreamos por encima los frutos secos picados que reservamos al principio y echamos por encima, repartiendo por todo el molde, el jarabe que hicimos en el paso anterior, intentando que no caiga la corteza del limón.
¡Y LISTO!

Observaciones:
A nosotras nos salieron 3 capas de frutos secos y 4 de masa filo con mantequilla por el molde que usamos, puede que a vosotros os salgan menos capas, no os preocupéis.
Utilizad los bordes que os hayan podido sobrar de masa filo al recortarla o hojas que se os hayan podido romper,  para hacer las capas del medio, no se notará que son retales o que están rotas.
 Como ya hemos dicho podéis emplear cualquier fruto seco que os guste, solos o mezclados, probad distintas combinaciones.

Como veis es un dulce sencillo y facil de hacer. ¡Animaros y mandarnos las fotos de vuestros baklavas!
Bon apetit!